Numerosas caídas o accidentes con cables eléctricos, coches, cristales, etc. acaban con la muerte instantánea, así que ya no hay ayuda.
Pero si el pájaro sobrevive un tal atropello hay que reaccionar rápidamente: Lo más antes posible el veterinario tiene que emprender un tratamiento antichoque.
¡No trate nunca de alimentar o abrevar!
Convulsiones y disfunciones del sistema nervioso central pueden tener muy diferentes causas. En muchos casos aparecen después de un accidente y a veces un tal vencejo sufre de nada más que una conmoción cerebral, y se restablece depués de unos días de tranquilidad y calor.
Pero si se observan síntomas más graves, como ataques de convulsiones, movimientos giradores como una peonza, volteretas, estereotípicos movimientos de cabeza, el pronóstico es reservado. Tales pacientes necesitan lo más pronto posible el cuidado de un veterinario con experiencia en el tratamiento de pájaros.
Convulsiones se observan también con vencejos criados a mano, que han sido nutridos con insectos como corresponde. La razón es una falta de vitaminas del complejo B.
Las síntomas de tal falta de vitamina B pueden presentarse muy de repente, empeorarse rápidamente y pueden acabar con la muerte si no son tratados a tiempo. Cuanto más joven es un vencejo lo más dramático es el desarrollo de las complicaciones: un pollo de pocos días puede morir dentro de una hora.
Las síntomas empiezan sin que uno se dé cuenta, primero con pocas ganas de comer, mirada aterida y movimientos compulsivos de la cabeza y se aumentan hasta lanzar la cabeza hacia atrás, convulsiones incontroladas y movimientos giradores.
Con vencejos adultos se observaban también gritos estremecedores, se agarraban dolorosamente a la mano y se echaban de un lado al otro sin control. Tales ataques pueden ser parados inmediatamente, recibiendo una inyección con vitamina del complejo B por el veterinario. La mayoría de las veces los pájaros muestran reacciones normales de nuevo media hora después.
A los que han sido nutridos con gusanos de la harina o grillos de menor calidad o que tienen que permanecer bajo cuidado humano más allá del tiempo de la crianza, p.ej. los que están empujando plumas, les toca más temprano.
Por alguna desconocida razón ha aumentado tanto la propensión de los vencejos bajo cuidado humano en los últimos años que se recomienda inyectarles profilácticamente cada 10-12 días subcutáneamente la vitamina del complejo B por un veterinario.
Dárselo oralmente al pico casi no tiene efecto en los vencejos. Parece que una dosis profiláctica junto con el alimento tampoco impida siempre los síntomas de carencia. Los síntomas de falta del complejo de la vitamina B son conocidos también en las golondrinas y otros pájaros cantores insectívoros.
