Desgraciadamente tuvieron que ser separados, Tutus y Gwizdek, la pareja inseparable de Polonia. El 15 de marzo Tutus, el vencejo impresionante de Breslavia, viajó junto con otros 12 a Fuerteventura mostrando un despegue fulminante.
Su amigo Gwizdek, quedándose atrás en la clínica de vencejos, puede seguirle ahora. Ayer tuvo su operación de injerto. Hoy día ya tiene su primer vuelo de entrenamiento. Y en una semana, más o menos, va a viajar a Fuerteventura con el supuesto último vuelo de esta primavera. ¿Si alcanzará todavía a su Tutus?
Sea como sea, el cielo será el hogar de los dos, tal vez se encuentran realmente de nuevo algún día.