Nuestros colaboradores y amigos de muchos años, Alexandru y Mihaela Stahl de Rumania, que llevan un centro de recuperación para vencejos en Bucarest, habiendo formado la Iniţiativa "Drepneaua neagră România”, están en nuestra clínica desde hace 4 semanas. Ya se han convertido en una ayuda indispensable para nosotros. Cuando a mediados de agosto ya no podían encontrar insectos alimenticios para sus vencejos, emprendieron el largo y cansador viaje a Frankfurt para salvar y traernos a sus últimos vencejos. Muchos habían sido alimentado erróneamente por sus halladores y por consecuencia tenían defectos del plumaje. El método medieval de los halconeros de injertar plumas que practicamos a gran escala aquí, era la única posibilidad de sobrevivir para estos vencejos dañados. La mayoría de ellos ya ha podido ser liberado mientras tanto, hace poco el pequeño Aleodor que había sido llevado a su centro el día del viaje, medio muerto y extremamente mal nutrido; fue un milagro que sobrevivió el larguísimo camino, gracias al cuidado de Mihaela. El 19 de septiembre Aleodor despegó hacia el cielo de Frankfurt, sano y fuerte.

Estamos muy tristes que Alexandru tuvo que regresar a Bucarest mientras tanto, pero somos muy contentas que Mihaela va a poder quedarse todavía un tiempo aquí.