El 11 de agosto publicamos el caso triste de un vencejo juvenil con un defecto generalizado del plumaje, donde un inexperto había tratado de "estabilizar" las plumas con supercola y cinta adhesiva.
A Feivel - así llamamos el pobrecito -casi le hubiera costado la vida. Después de un largo tiempo el pájaro maltratado y bajo choque empezó a tomarnos confianza y ya no reacciona con pánico cada vez que se le saca de la caja.
Las plumas pegajosas tuvieron que ser sacadas completamente. La mayoría creció de nuevo sin problemas. Las plumas primarias que habían quedado rotas y bien cortas, han sido cambiadas anteayer mediante injerto. Hoy Feivel ya ha empezado a dar sus primeras vueltas en la sala de entrenamiento. El pequeño luchador valiente nos llena de mucha esperanza. Desgraciadamente ya no podemos liberarlo desde Alemania, debido al tiempo que ha cambiado ya. Feivel tendrá que esperar entonces a un transporte al sur.