Hoy día sobre el mediodía volaron Roisin de Rüsselsheim, Antonin de Flörsheim y Joffrey de Mörfelden-Walldorf – por suerte salvado, como habíamos informado – y también Sarka de Dresden, un vencejo muy bravo que nos llegó hace 2 semanas después de haber chocado contra un obstáculo. Samuel de Bad Homburg, enviado por un centro de protección de animales – su halladora lo había alimentado fatalmente con pan – y Caitlin de Darmstadt, que se había perdido en el undécimo piso donde llegó a conocer a un gato casero que, menos mal, no le hizo nada.
Miramis de Paderborn tiene que „engordar“ algunos gramos antes de que pueda regresar al aire.
Esperamos que nuestros vencejos disfruten de su libertad y ¡que esta vez se queden arriba!