La correspondencia internacional y la admisión de pacientes de toda Europa ya forman parte del trabajo diario desde hace mucho en la clínica de vencejos. Pero el hecho de que visitantes de países lejanos aparecen en un mismo día es un evento más bien raro. Hoy día atendimos al abogado español Jose Luis Mazón Costa y su mujer, que nos trajeron por avión a dos huéspedes tardíos: el juvenil vencejo pálido, Boquerón, de Málaga y el adulto vencejo común, Aimie, de Toledo. Cuatro semanas atrás Jose Luis ya nos había entregado un pequeño vencejo pálido: su Augusto (vea noticias), que todavía está en tratamiento aquí.

Por la tarde llegaron nuestros amigos italianos de Trieste para recibir aquí en nuestra clínica un diagnóstico para sus últimos casos problemáticos. Nuestra lista internacional de pacientes fue ampliada por una nueva nacionalidad. Un pequeño monegasco de Monte Carlo, Grace - ¡no podría llevar otro nombre!, pertenece ahora a nuestro grupo de huéspedes. Fuera de algunos vencejos con fracturas viejas y graves defectos del plumaje, vino un vencejo juvenil que acaba de volverse volantón: Felicino fue encontrado a mediados de noviembre en Trieste, ¡que cosa más increíble! Una cría tan tardía nos sorprende enormemente. Pero el candidato despistado ha tenido suerte: ¡el 16 de diciembre puede viajar ya a Fuerteventura!